Hallé

Me asomé a la alberca de tus besos,

te absorbí con el color de mis palabras:

la noche transformó su melodía

en una fuente de ternura sin orillas,

en un oasis de frescura ilimitada.

Y busqué en el brocal de tus sueños

Más agua que saciara la agonía,

Más besos al calor del pensamiento

Más risas enredadas entre sábanas.

En el aljibe de tu boca hallé

Mil versos inventados en susurros,

Mil caricias en silencio derrochadas,

Mil deseos que despiertos concedían

La textura que a mis labios bloqueaba.

Maritxé Abad i Bueno

28 Mayo 2015