Te vi salir como una sombra del
pasado
por las callejuelas de Vila real como la oscuridad del tiempo.
Tú toda vestida de negro, un negro raído y viejo.
Tu cara alargada y arrugas como surcos en la tierra
del llanto de todos tus antepasados y muertos.
¿Hasta donde los has sobrevivido?
Mujer que llevas tus pensamientos en un ayer tan lejano
cuando la Portugal de las colonias mandaba
y mandaban como esclavos en el tiempo a sus hijos
a defender tierra ajena por mandato presidencial.
Llevas un luto como una segunda piel
un andar ligero a pesar de tus muchos años
tus pensamientos viajan al son de tus palabras.
¿A quién le hablas? ¿A un marido muerto?
¿A unos hijos que no escuchan?
¿A este día soleado que te toca malvivir?
¿O la noche oscura de tus sueños de niña?
¡Dime, mujer enigmática!
¿Esa sombra es el guerrero que te atormenta?
¿O es la luna que cada plenilunio acaricia tus oídos?
¡Dime, mujer de negro vestida!
¿Queda algo de amor en tu corazón?
¿O lo llevas prendido en tu memoria
como los alimentos en tu alacena?
¿Cantas cada mañana con las luces del alba siempre la misma canción?
¿O buscas en la tierra algún olvido que te atormenta o te hizo feliz?
¿Arañas los cristales de tu belleza? Es porque fuiste bella alguna vez
Cuando el sol salía en tu niñez , ¿te dejó la palabra amor?
Dime si llenaste tus noches con una nana para tus hijos
Dime mujer de negro aceituna ¿Qué buscabas en el corazón de este siglo
XXl ,tan desviado de tu camino? ¿Amor o consuelo?
¡Cuán desdichada eres hoy buscando en esta tierra seca para tus anhelos, la luz del faro que te guíe hasta el final!
¡Vuelve a tu casa, aquella que te dio la felicidad entre paredes
desconchadas y lumbre a medio encender en tu invierno eterno!
Entre los llantos de los hijos y la grietas en las manos
de un marido jornalero de sol a sol o marinero de rostro de sal
que buscaba en los peces un
alimento divino que te hiciera
llegar hasta el día hoy para que mis ojos asombrados
intenten descubrir tu vida, tus amores, tu pasos, tu dolor,
tantos que quiero llorar contigo, porque la pena,
esa pena que tu llevas dentro también hoy la siento yo.
Paco Herrera
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