Club de Letras UCA (Cádiz, Jerez de la Frontera y Algeciras)
Director: Profesor de la UCA Dr. José Antonio Hernández Guerrero
Coordinación del blog:
Antonio Díaz González
Ramón Luque Sánchez

Contacto y envío de textos:
clubdeletras.uca@gmail.com


martes, 23 de enero de 2018

Homenaje a Gloria Fuertes 26-5-2018 (Recordatorio textos)










26 DE MAYO DE 2017

El viernes 26 de Mayo de 2017, a las 6 de la tarde, en la Biblioteca central de la Universidad de Cádiz nos reunimos los miembros del Club de Letras de la UCA para recordar a la poeta Gloria Fuertes en el centenario de su nacimiento.


Cartel Homenaje G Fuertes


El acto comenzó con la bienvenida por parte del director de la Biblioteca, Sr. Ricardo Chamorro, que agradeció al Club la organización del acto en estas instalaciones y nos invitó a disponer de ellas siempre que sea necesario. A continuación, Agustín Fernández, en representación del Club, dio las gracias a su vez al director, reconociendo públicamente su magnífica acogida y total disponibilidad, y dio paso a las intervenciones.


En primer lugar tomó la palabra el director del Club, prof. José Antonio Hernández Guerrero, que dirigió unas agradecidas palabras a nuestro anfitrión de reconocimiento a su trayectoria personal y profesional, dando las gracias por la actitud siempre acogedora de la Biblioteca. Después comenzó su conferencia, que versó sobre la vida y sobre todo la obra de Gloria Fuertes, deteniéndose en alguno de sus poemas que precisamente se refería a sus motivaciones y reglas a la hora de escribir, y resaltando no sólo su más conocida faceta de poeta para niños y niñas, sino también su interesante trabajo dirigido al público adulto.

Esta intervención dio paso a las distintas lecturas de los miembros del Club, que presentaron sus propios textos en el caso de Carmen Franco, Leonor Montañés, Maritxé Abad, Manuel Bellido, Mª José González, Lourdes Torrejón,  Antonio Díaz, Pilar Ruiz y Ramón Luque. Por su parte, Luisa Niebla, Mª del Carmen de Castro y Agustín Fernández leyeron creaciones de la propia Gloria Fuertes.




Terminamos el homenaje a las 19:45 horas, cerrando el acto con la emisión de un video, preparado por Antonio Díaz, con imágenes y poemas recitados de Gloria Fuertes.

Un precioso final para otra tarde muy agradable dedicada a las letras.



LA ESPERA (versos pueblerinos)

Por María del Carmen de Castro Cabrera

Aquí que me ves estoy
Con una rama en el pico,
Con una oliva en la rama,
Con la vida casi en vino.
Escribiendo como un monje,
Estudiando como un niño,
Trabajando como un tonto,
Observando como  un simio,
Esperando como un huevo
A ser útil –pollo o frito—
ESPERANDO  sobre todo
(¡Qué verbo tan socorrido!)

Vivir es la larga espera
De todo lo que ha nacido,
(que resulta un sin-vivir
De tanto esperar vivirlo):
Colocación, el empleo,
Que la beca, que el destino,
Ahora un viaje, luego boda,
Que nos quieran…luego un piso;
ascender,  tener salud,
ser importante, ser rico.
Tener más…a ver si llega…
…pudiera ser…
…¡Si muriera fulanito!

Conocí a un camaleón que vivió
Como un bendito;

La ocupación de esperar,
No nos deja hacer lo mismo.


CARTA DE PHILLYS

Por Antonio Díaz González

(Me he permitido imaginar la carta que Phillys enviaría a un supuesto pretendiente de su compañera Gloria)

A ver cuándo te enteras, necio amigo
de que mi Gloria es fruto como ostra cerrada para ti
y que su almíbar no será elixir para los dioses
ni para ricos, ni potentados,
ni toreros, ni futbolistas de fama,
ni comandantes ni generales,
ni siquiera para atractivos engominados
que  mercadean cuitas y besos
en saraos y romerías.

Quizás, si acaso
sería para algún loco desahuciado de verbo afable
Y barba de tres meses y un día.
Con océanos en la mirada
Y en los hombros un naufragio

Pero no para ti

Y has de saber, necio amigo,
Que tu báculo no abrirá sus mares
Ni sus temblores de almíbar.
Y sabed, mi necio amigo,
que una palabra suya bastará para sanarme.


LA FORTALEZA DE GLORIA

Por Carmen Franco Sánchez

En la Gloria nació, y junto a una espada vivió.
Entre labores y portales la niña creció.
Estudió con monjas de mala leche, y entre antigüedades jugó.
Con sus zapatos descosidos y sin muñeca con la que jugar,
no le dio otra vena que escribir y trabajar.
No quería costuras, ni a niños cuidar.
Ella lo que clamaba era el fútbol y conjugar el verbo “poemar”.


LA VELETA

Por Leonor Montañés Beltrán

La veleta siempre parada pero nunca quieta. Gallos, brujas, barcos, cigüeñas, búhos o sirenas. Gira que te gira,  siempre dando vueltas te bamboleas en tu quietud. Sueñas con un viento huracanado que arranque tu pie clavado. Sueñas con volar junto a bandadas de gansos que camino de otras tierras graznan en los ocasos. Sueñas con arrancar las raíces que te agarran que no dejan que tus pies puedan emprender los pasos. Quieres levantar el vuelo y alcanzar el horizonte y asomarte a las montañas y esconderte por el norte. Curiosear por el mundo, pasearte con derroche y acercarte exploradora visitando otros rincones. Injusto vivir el tuyo sin posibilidad de moverte. Pregúntale al pajarillo que sobre ti se pose, dile al búho trasnochador que te cuente de la noche. Llama al cuco caradura y a los jilgueros veloces que se sienten a tu vera y te cuenten con sus voces. Pide al aire que susurra que te describa los montes, que te detalle los mares, que te hable de los valles, de los ríos y de los bosques. Pide al herrero que te hizo que te suelte los anclajes, que ponga vela a tu mástil, que la libertad te otorgue, que te conceda la dicha de emprender ese viaje.




GLORIA FUERTES EN BLANCO Y NEGRO

Por Lourdes Torrejón Iglesias

Su recuerdo siempre fue en blanco y negro, el televisor de mi infancia, no daba para más, y su poesía– al igual que su imagen - me resultaba extraña y sin sentido. Mi memoria de niña guardó aquella voz, el chaleco, la corbata y sus versos en la categoría de programas infantiles.

No volví a pensar en ella hasta la Navidad de 1998 cuando me regalaron un librito rojo con letras doradas: Obras incompletas de Gloria Fuertes. Novena edición de la seria y concienzuda editorial Cátedra. Qué raro - pensé- esta no es una edición infantil. ¿Qué hace Cátedra publicando obras de esta autora?...

Me bastaron estos versos para comprenderlo: “Es difícil rectificar en vidrio, acuarela o amor”.


NIÑA SIN FIN
Por  Maritxé Abad i Bueno

Genuina la visión que haces de lo cotidiano.
A escucharte me llevas desde la portería,
la misma que frecuentas en tus atardeceres.

Te vistes de cuento, te haces cuento y flor:
absorta escucho tus aromas de risas cada mañana.

Huérfana de abrazos siento tu poesía
cuando un ángel sobrevuela la cabecera de tu cama
queriendo con ello mitigar la tristeza que te acuna.

Despierta el amor en ti mariposas en tu vientre
y nos cantas a la vida.

Las otrora salinas muestras de hambre y espinas
nos dibujas de clamores al hervor de la sangre.

Te acercas, no te ves, te ves, te veo, creo en ti,
en aquello que desde tu sencillez, haces eterno.

Todo el pasado se quiere apoderar de mí
y yo me quiero apoderar del futuro,
me dislocan la cabeza para que mire atrás
y yo quiero mirar adelante.

No me asustan la soledad y el silencio,
son los lugares preferidos de Dios
para manifestarse.

Mi eterna gratitud a los que me quieren,
siempre les recordaré a la hora del sol.

No puedo detenerme,
perdonad, tengo prisa,
soy un río de fuerza, si me detengo
moriré ahogada en mi propio remanso.


NIÑA GRANDE

Por María José González Cid

La recuerdo, ancha de hombros con una sonrisa perenne colgada de su cara, con las emociones a flor de piel, con una risa contagiosa y siempre irradiando felicidad.

Hacía las cosas y los gestos pequeños, imborrables. La negrura gris y la lluvia un festín inesperado.

Siempre me ha parecido muy difícil hacer poesía, pero en ella todo parecía fácil.

Verdaderamente su aspecto físico imponía, pero su dulzura arrasaba.

Gloria Fuertes que estás en todos y cada uno de nosotros: Gracias.


AUTOBIOGRAFÍA

Por Gloria Fuertes

Gloria Fuertes nació en Madrid
a los dos días de edad,
pues fue muy laborioso el parto de mi madre
que si se descuida muere por vivirme.

A los tres años ya sabía leer
y a los seis ya sabía mis labores.
Yo era buena y delgada,
alta y algo enferma.

A los nueve años me pilló un carro
y a los catorce me pilló la guerra;
A los quince se murió mi madre, se fue cuando más falta me hacía.
Aprendí a regatear en las tiendas
y a ir a los pueblos por zanahorias.

Por entonces empecé con los amores,
-no digo nombres-,
gracias a eso, pude sobrellevar
mi juventud de barrio.

Quise ir a la guerra, para pararla,
pero me detuvieron a mitad del camino.
Luego me salió una oficina,
donde trabajo como si fuera tonta,
-pero Dios y el botones saben que no lo soy-.


Escribo por las noches
y voy al campo mucho.
Todos los míos han muerto hace años
y estoy más sola que yo misma.

He publicado versos en todos los calendarios,
escribo en un periódico de niños,
y quiero comprarme a plazos una flor natural
como las que le dan a Pemán algunas veces

Elegido por Agustín Fernández Reyes



"EN BUSCA DE  P A Z"

Por Mercedes del Pilar Gil Sánchez

Voy en busca de tres letras
Que hablen siempre de paz
Una P, y una Z,
Y en el centro una A.

Tanques y acorazados,
Cazas de guerra y de más,
Que disparen estas letras,
Hechas de nube de mar.

Y que disparen gomitas,
Si es que hay que disparar,
Caramelos que se encojan,
Y se puedan estirar.

Que disminuyan las guerras
Y que dilaten la PAZ.
Ricos sabores de menta
Papaya, Almendra, aZahar,

Que son sabores valiosos,
Sabores cargados de PAZ.
Que no sufran ya más niños,
Y amarnos en LIBERTAD

Y esta es otra palabra
Que debemos preservar.



AUNQUE NOS MURIÉRAMOS AL MORIRNOS

Por Gloria Fuertes

Aunque no nos muriéramos al morirnos,
le va bien a ese trance la palabra: Muerte.
Muerte es que no nos miren los que amamos,
muerte es quedarse solo, mudo y quieto
y no poder gritar que sigues vivo.
Elegido por María Luisa Niebla López




EN LA GLORIA

Por Pilar Ruiz Cuesta
Cuando mi tiempo era nuevo,
me pretendieron tus versos,
los acercaste con tres globos y me aupaste a un camello.

Contando disparates, me prestó Doña Pito sus guantes.
Tú, el sol, tu sombra y yo… no sois tres, fuimos cuatro un verano en la playa.

Contigo bruja blanca y mis renacuajos,
preparamos brebajos,
que con la prisa de leer nos dio la risa.

Me enseñaste poemas y amores,
y me salieron los colores,
al descífrate y pensarte.

Porque yo también ame a un pájaro-una tórtola-
que era artista y me dejo absorta.

¿Y hoy Gloria que dirías?
¿Vivirás de tus poesías?

Como posteó “El Confidencial”
“Donde un tuitero vende más que un Dragó”…

Tú recitaste,- Nací para poeta o para muerto
Y escogí lo difícil-.

Quizás no venderías, ni comprarías…
Pintarías # con Acción Poética en los muros  de las casas.

Quizás no tendrías volúmenes con hilos cosidos…
Pero hoy Gloria, con tus historias, petarías Twitter.


YA ESTÁ EL NIÑO EN EL PORTAL

Por Gloria Fuertes

Ya está el niño en el portal
que nació en la portería,
San José tiene taller,
y es la portera María.

Vengan sabios y doctores
a consultarle sus dudas,
el niño sabelotodo
está esperando en la cuna.

Dice que pecado es
hablar mal de los vecinos
y que pecado no es
besarse por los caminos.

Que se acerquen los pastores
que me divierten un rato
que se acerquen los humildes,
que se alejen los beatos.

Que pase la Magdalena,
que venga San Agustín,
que esperen los reyes magos
que les tengo que escribir.

Seleccionado por Manuel Bellido Milla






(A continuación recita su propio poema)


GLORIA BENDITA

Por Manuel Bellido Milla

En el taller de José
Junto aquella portería
En la que al nacer Manuel
Los pastores sonreían.

Llegaron sabios doctores
Con las dudas que tenían
Y al encontrar las respuestas
Borrárseles la alegría

Pues ellos querían saber
Qué cuestión era pecado
Y a los vecinos querer
No les pareció apropiado

¡Aléjense los doctores!
Se oyó decir al neonato
Y aquel que tenga dolores
Que pase conmigo un rato

Que está aquí la Magdalena
Que llegó San Agustín
Que me han traído una Tablet
Con la que quiero escribir


EL NIÑO INOCENTE
Por Ramón Luque Sánchez

El niño Inocente
habita en el limbo,
envuelto entre abrazos,
cubierto de mimos.

Apenas si lee
y escribir no sabe,
le asustan los números
y un ruido en la calle.

Anda lentamente,
con mucho cuidado,
para no caerse
si da un mal paso.

El niño Inocente
es un soñador
de estrellas que bailan
al son de un tambor.

A veces aplaude,
te hace pucheros
y toca las palmas…
¡Todo al mismo tiempo!

Grita si lo llamas,
manotea al verte…
¡Qué bello regalo
su espíritu alegre!

El niño Inocente
siempre está feliz,
te anima su risa
limpia e infantil.


No hay comentarios:

Las opiniones vertidas en las publicaciones de este blog son responsabilidad exclusiva de cada firmante.